miércoles, 21 de marzo de 2012

El paraguas amarillo

Autor: Joel Franz Rosell 
Ilustraciones: Giulia Frances Campolmi   

Editorial: Kalandraka   
                                 
El paragüas amarillo 


En una ciudad gris y con gente gris, el operario de una fábrica de paraguas comete la osadía de saltarse las normas establecidas y fabricar un paraguas amarillo pese a que lo que se lleva son los paraguas de color negro, marrón, verde y azul oscuro. Así que, cuando apareció en la fábrica aquel paraguas amarillo, todo el mundo se quedó frío. Un paraguas de semejante color no estaba en los planes, ni en los catálogos, ni en los pedidos...

 







El relato de Joel Franz Rosell reivindica, pues, la libertad y la creatividad frente a la rutina y las convenciones impuestas.
Una aparente cotidianidad o vulgaridad no debe confundirnos ya que puede esconder un gran éxito.  Si bien un paraguas amarillo ahora no sería extraño, si podemos entender que el paraguas se ve feo por ser distinto, se siente diferente y por lo tanto, es considerado por todos defectuoso. Pero seguramente un niño sentirá que precisamente por ser de otra forma es maravilloso, demonstrando lo relativo de las cosas, aunque el paraguas se siente mal consigo mismo porque  ni sospecha lo bonito que lo ven los lectores de su historia.
Es una gran metáfora de la vida y de relatividad del fracaso y el éxito, de lo bello y lo feo, de lo correcto o lo incorrecto, de lo que podemos llegar a hacer. 

Joel Franz ROSELL
Mi foto"Nacido en Cuba en 1954, me trasladé en 1989 a Rio de Janeiro y, sucesivamente, a Copenhague, París, Buenos Aires y de nuevo Paris (desde 2004) donde me consagro a mi trabajo de autor y a las animaciones literarias. He publicado una veintena de libros para niños y jóvenes en español. Varios de ellos han sido traducidos al francés, el portugués, el gallego, el vasco, el inglés y el coreano"




CANCIÓN: Y LLOVERÁ

 

Con un paraguas de color blanco y pintura especial para tela podemos crear algo único. Es una actividad especialmente recomendada para esos peques a los que no les gusta demasiado usar el paraguas y los días de lluvia toca "negociar".









                               

                       

2 comentarios:

  1. ¡Yo quiero ser un paraguas amarillo! me gustan los cuentos que te hacen pensar...

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  2. Es cierto que hasta que no se llega a cierta madurez cuesta verse bien si se es diferente. Con lecturas como El paraguas amarillo podemos hacer pensar antes sobre la importancia de quererse y respetar la opinión de los demás pero que no sean imprescindibles para ser felices y gustarnos como somos.

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